26 de diciembre de 2016

TIRAMISU DE TÉ MATCHA

Mi amiga Silvia me pasó esta receta y luego me regaló té matcha... ¿o fué al revés?....no me acuerdo bien. Lo que sí se, es que estaba haciendo pereza para hacerla y el otro día me dí cuenta que me quedaba poco té -qué rico está- y me puse con ello. Acostumbrados al tiramisú clásico o con frutas...., éste da una sensación rara a la primera cucharada pero, como la tónica, según vas avanzando en ello, más te gusta. Por lo menos es lo que me ha pasado a mí...me ha faltado rechupetear la fuente...bueno, no voy a exagerar. Aquí tenéis mi versión de la receta:




Ingredientes: 250 ml. de agua, 1 cucharada sopera de té matcha en polvo, 400 grs de queso mascarpone, 4 yemas de huevo, 100 grs de azúcar, 1 bolsa de bizcochos de soletilla y té matcha en polvo para espolvorear.




Preparación: Calentar en un cazo un poco el agua y tamizar sobre ella la cucharada de té matcha. Remover hasta que no queden grumos. Dejar enfriar y reservar.
En otro cazo, batir las yemas junto con el azúcar, hasta que la mezcla blanquee. Incorporar el queso mascarpone poco a poco e ir mezclando con una varilla hasta que quede una textura cremosa.
Mojar los bizcochos en el agua con matcha hasta que se reblandezcan (yo no los he dejado empapar), escurrir el sobrante y colocar los bizcochos en una fuente (yo de cristal tipo Pyrex cuadrada) y poner encima una capa de la crema de mascarpone. Haciendo capas hasta terminar con una de queso mascarpone.
Reservar en la nevera un mínimo de dos horas. Pasado este tiempo espolvorear por encima el té matcha en polvo y servir.




Notas: Yo utilicé un poco más de queso mascarpone. Por problemas de intendencia tuve que utilizar 2 huevos enteros. Me dió pereza hacer el bizcocho pero aquí tenéis mi receta y podréis comprobar el nivel de vaguería que tengo. Utilice una fuente de cristal tipo Pyrex cuadrada, me gusta ver las capas de bizcocho. De un día para otro queda más asentado todo, a mí me gusta más.


1 comentario:

MUCHAS GRACIAS POR ESTAR AHÍ, EL LLEGAR HASTA AQUÍ PARECE SER UNA PROEZA.

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